I
Respirar
restos de permutaciones;
al abandono
inaudito del rubor de la rosa, mesmerizando anotaciones
incomprensibles
en cada palidísima encarnación rondando contradicciones.
Muerte al
recuerdo, en la queja contra la soledad.
Muerte
doblando agujas dentro piel ausente.
Así sin
creer siquiera en parodiar respuestas se van
amontonando
los rastros;
en mis agrietados
restos.
Muriendo por
detenerte.
II
Volátil serenidad.
Astillas incrédulas.
Rencor afrontando/
calamidad al verdor.
Renacer apedreando/
tu ventana.
III
Sueños cristalinos,
eliminando fracciones.
Enterando recovecos,
puntos de vista, acciones inanimadas;
mullendo poesía garrapateando brillosas intersecciones.
Dónde; un beso, gira
entretejiendo la noche emparentandomuchas lunas.
Dame tu mano no sólo en
compromiso;
¿a dónde pretendes
tanto ocultarte?,
si no fuera un sujeto
atolondrado;
ahora podría estar a tu
lado rondando
cada lunar en tu
espalda.
Sin tener que hablar en
bajito magnetismo,
o deslizar mis
alborotados dedos por un trayecto vestido
en el insólito preludio
inquisitivo.
Sin ni siquiera
tocarte;
devastarte abriendo
fulgor/ cobrando días inhóspitos…
desvariando
reconociendo tu aliento alterado/ ¡aquél pronostico inolvidable!
[Irrepetible,
intimo, integral fantasía.]
No muñeca;
todos los puntos de tu
cuerpo,
obedecen al vespertino
infinito de la risa.
Mientras me tengas
guardada una sonrisa; me sobran esperanzas
de acudir a tus labios
a la hora indicada.
IV
De darte un nombre
sería; vendaval.
V
¿Verte?; ¿cómo quieras
que te vea si no me dejas?
Yo tengo nombre y
conoces mi rostro; tú me enamoras
por una vertiente de
ideas,
palpitando mis días
al calor inminente de
tu presencia;
en alguna parte/ en
alguna frontera.
¿Qué quieres
de mí?
¿Qué quieres
que sea para ti?
En tus ojos están mis
respuestas y en mis labios las tuyas.
Venimos de la misma
melodía,
y vamos a una marejada
absolutamente nuestra.
Ven, olvidemos las
ventanas
y reconciliemos estas
almas incompletas
que se nutren de frases
enteras;
esperando señas
perfectas en pausas inesperadas.
…invocando
calma;
juntos
simplemente juntos.
Entregándonos
al momento
mermando
olvido y prisa.
VI
Deteniendo el tiempo,
a partir de un
comienzo.
VII
Simplemente quiero
atesorar nuestro
encuentro;
una fracción de vida
sonriendo,
en la realidad
inminente sintiéndome tuyo,
por ése instante
demandándote
un abraza vital por el
cual pueda recordarte,
enlazando tu aroma
eternamente.
VIII
Corazón adulterado sin
certezas;
sigo preguntándome
porque la felicidad me está negada,
enterrando esperanza
de la sonrisa plena
amargamente.
Siento que arrancas lo
bueno y te alejas.
Siento un amor
imposible,
al cual tu no quieres
acercarte.
IX
Verdaderamente me
conformo con el afecto de tus pestañas;
si no hay otra ruta,
perdona la falta entusiasmo, pero algo de certeza
no me vendría nada mal,
queda únicamente la
dicha de quererte a ciegas,
esperando encuentres
estas letras
cada vez que quieras